La reencarnación de Girod

Termino la búsqueda de trabajo, en realidad nunca comenzó pero sin embargo ha concluido.

Rechace el puesto de jefe administrativo en Puerto madero con secretaria petera, porque eso es de careta, y yo necesito estar con el pueblo, como Lita de Lazari, como el general Perón.

Es por eso que ahora soy tu carnicero sexi, mami.

En realidad no soy carnicero así que tus sueños de verme musculoso con delantal ensangrentado ofreciéndote una buena longaniza podes obviarlo.

No, Yo soy el careta de la carnicería, el que atiende la caja, te envuelve el peceto, te da el vuelto y te mira el culo cuando te vas.

Y no tengo permitido utilizar el vocablo mami, pues si lo usaría los carniceros posta me mirarían con cara de culo.

Sin embargo yo lo voy hacer igual, te voy a decir mami, y te voy a mirar el culo, así que si andas escasa de autoestima ándate para el barrio.

Es asi, Arata esta de vuelta en la carne, la utopía de volver al turismo y tener un trabajo canchero quedo sepultada por bolas de lomo y tapas de nalga, es ahí cuando me doy cuenta que la misión que tiene Dios para mi en esta vida es la de proveerte el asado para el domingo, recomendarte los chorizos y hacer mas amena tu visita al supermercado, puede ser que sea una misión de mierda pero quien soy yo para juzgar a Dios.

La idea en casa cayo bien, no porque sea un trabajo con futuro y proyección sino porque de este modo no me ven mas levantarme a las dos de la tarde bajo los efectos de la trasnoche, la falopa y los partidos de winning eleven de madrugada, a esta altura si decía que quería ser astrólogo, o transexual matriculado también hubieran dado el visto bueno.

Si pensas que atender una carnicería en un supermercado es grasa, mejor no te cuento que dicho supermercado se encuentra en un barrio atrás de las vías, frente a un baldío y que se escucha cumbia santafesina al palo, mejor no te lo cuento, pero ya te lo conté.

Pero yo no vivo de tus prejuicios, yo vivo del salario digno.

Si bien hace poco estoy detrás de una caja registradora rodeado de cadáveres y mutilaciones varias e podido observar ciertas cosas que solo pasan en la carnicería:

• Todos los productos vendibles se le puede dar un doble sentido y usarlo como coqueteo para con las clientas: morcilla, salchicha barrillera, chorizo, ubre, bola de toro, nalga, longaniza son buenas opciones.
• Todo tiene un aire porno que puede servir para levantar mujeres, a mi solo me sirvió para que se me insinúen travestis, pero eso es por desgracia propia y es la excepción y no la regla.
• Los carniceros se tocan el culo y se apoyan, y nadie duda de ellos porque los carniceros son machos, no hay carniceros putos.
• A las mujeres se las debe tratar bajo los nombres de mami, madre, mama, ma, mamita y doña ningún otro adjetivo es bien recibido en el gremio.
• Las conversaciones entre carniceros se limitan a fútbol, trolas, travestis, cortes vacunos, frula y fiestas sexuales.
• Los carniceros jóvenes escuchan cumbia, los carniceros viejos folclore.
• Los carniceros están enojados conmigo porque querían que pongan una mujer de cajera para verle el culo y no un gordo para verle la panza.
• Los carniceros se la pasan cojiendo, los cajeros se limitan a escuchar las proezas sexuales.
• Dos de cada tres viejos vestidos de guacho, al terminar de abonarme el asado putean a Cristina Kirchner.
• Nunca falta el borracho, el travesti y la vieja rompe pelotas que quiere las milanesas finitas aunque te rebanes un dedo.

Dudo mucho que quien lea este posteo piense que estoy feliz con este trabajo, pero aunque si bien no es así tampoco esta nada mal, es divertido, me hace sentir polenta, puedo escuchar gilda, estoy en contacto con las carencias y las desgracias del pueblo, y con suerte podré comprarme una nintendo wii.

Gracias a dios, mis sueños son alcanzables y fáciles de cumplir, hay meses que prefiero la comodidad y el conformismo, sino caería en una nueva depresión, y nadie quiere un arata deprimido.

Bah algunos si, pero a la gilada no les doy los gustos.

Ya sabes, si queres encontrarte el cajero mas lindo y amable de zona sur que te cuenta chistes de travestis, extraterrestres, y travestis extraterrestres gratis con la compra de un kilo de falda parrillera, ya sabes donde encontrarlo, apurate porque este no va a ser un trabajo de toda la vida, ando con ganas de probarme en una verdulería.

Martín Arata, tu carnicero sexy, mami.