Arjona saco nuevo CD

Las mujeres pueden sentirse ofendidas y pensar que soy un gordo boludo, pero igualmente lo piensan aunque no critique a su ídolo, así que a chuparla, literalmente, de la otra manera si quieren también.

Yo no se porque a las mujeres les gusta Arjona, pero yo antes de hablar con una mujer pienso por dentro mío, le gustara Arjona?, si le gusta Arjona tiene un costado pelotudo y en un futuro próximo puede pedirte que la acompañes a un recital del colombiano este, y si esta buena y tiene buen culo la vas acompañar, por un buen culo yo la acompaño a ver Arjona a que se excite y después se desquite conmigo.

El tipo es vivo el tipo sabe como comprarse al publico femenino y entonces le habla en su idioma, desamores, menstruaciones, etc.

Análisis de su último hit: Marta.

Cantando en la calle Florida

un forastero en Buenos Aires

descubrí que la vida

es una eterna huída, sin más...

Se la de pobrecito bohemio y se hace el que le gusta la argentina.

Por equipaje una mochila,

un pan francés y un queso de cabra,

buscando alguna bisagra

que me haga ser carpintero para que se abra.

Se hace el viajero el buscador de sueños, el pobre y hasta se compara con Jesucristo.

Cómo olvidarme de Martha

aquella stripper de la Recoleta

Si me dejó un par de huellas

en el cuello y en la vida

Acá le pinto irse de trolas a un lugar cheto.

Cómo olvidarme de Martha.

Me fui siguiéndola hasta Río

trabajamos en el mismo antro,

ella vendía su silueta

yo tocaba la trompeta en una banda de jazz.

Se hace el under, el enamorado.

El viaje siguió en Venezuela

la vida era nuestra mejor escuela,

trabajábamos en el mismo antro

la comida y la vida era un espanto.

Acá se define pro yanquie detestando el modelo chavista apoyando a Clarín,
los militares, la iglesia y las ideas pintorescas de Mirta Legrand.

Cómo olvidarme de Martha

aquella stripper de la Recoleta

Si me dejó un par de huellas

en el cuello y en la vida

Acá sigue hablando de cuando se levanto una trola.

Cómo olvidarme de Martha.

Por fin llegamos a México

aquí todo cambia a éxito,

ella consiguió su sueño

de convertirse en modelo.

Resumen, se cargo una mochila y se vino a la argentina se fue de putas, se levanto una tal marta, pero con h, porque era una marta canchera de Recoleta, se fue tras un culo a brasil, el tocaba la trompeta y ella se prostituía, luego se fue para Venezuela y descubrió que Venezuela apestaba se escapo rápidamente, y se fue al “paraíso mexicano”, donde ambos triunfaron y pasaron de ser una trola argentina a reconocida modelo en México, mientras que el paso a ser de un trotamundo con guita a representante y pareja de Marta, perdón Martha.

Conclusión: No me cabe Arjona, perdón. 

A continuación el post, perdón la intro era larga.

ODISEA DE COMPRAR UNA WII

No crean que es así de divertido, nunca jugas con una morocha y una rubia que

 estén buenas, terminas jugando solo o drogado con amigos.

Podré encaminarme para los treinta, podré tener aspecto de hombre maduro, macho y sucio, pero sigo teniendo un niño adentro, inmaduro y pelotudo, el mismo que me motiva a comprar cosas para niños, aburrirme y revenderlas por mercadolibre.

Cuando tome el laburo de carnicero sexy, lo hice por dos cosas, para ver si enganchaba clientas sedientas de tripa gorda y chorizo y para poder comprarme una wii.

Obviamente solo me compre la Nintendo Wii, ya que eso es accesible con dinero y no con chamuyo y carisma.

Hay dos maneras de comprarse una wii, la primera es con plata, la segunda con astucia.

No tengo plata ni astucia, así que apele al regateo, el llanto, la crisis emocional y el esfuerzo de recorrer mas de cincuenta kilómetros, en colectivo, tren, subte, tren de nuevo y a pie para conseguirla a un precio excesivamente bajo.

Esta estrategia me ha llevado a meterme en monoblocks, lugares oscuros y transacciones con travestis de dudosas intenciones, pero son los riesgos que el pobre consumista debe correr.

Por suerte esta vez me llevo a la ciudad de Ramos Mejia.

Recorrí muchos lugares de Buenos Aires, pero nunca habia pisado territorio Ramos Mejiano y cuando uno se dirige a un lugar desconocido tiene una vision que generalmente difiere bastante a lo imaginado, yo pensé que al descender del tren me iba a encontrar con barrios privados, viejas paseando perros de bolsillo, y guardias de garita que me mirarían con desconfianza, al final la ciudad es como cualquier otra de Capital, una pena yo quería un lugar de glamour donde todos me miraran con miedo, pero pase desapercibido.

Como dato de color cabe destacar, que me estuve meando y cagando todo el viaje de seis horas, y no encontré el lugar apropiado para evacuaciones liquidas y sólidas, no daba para entrar al baño de Constitución, entre tres veces y tuve miedo las tres, el suficiente miedo para que no me salga el chorro, mas teniendo en cuenta el mito urbano de que hay un hombre que ofrece hacerte un pete, por otro lado tampoco daba para embarrarle el baño al vendedor de la consola, seria de muy hijo de puta, por masque no lo vea nunca mas.

Como no podía ser de otra manera el viaje de regreso termino con empujones gritos, puteadas y la reciente compra arrojada al vacío del tren.

Es bien sabido que bajar en la estación de once del tren Sarmiento provoca una serie de apretujones entre la gente que asciende y desciende de la formación, pero esta vez fue bastante particular, un aglomerado importante de personas no me dejaban bajar del tren, me empujaron,  me tiraron la wii a la mierda y hasta me colaron un dedo, yo no podía dejar la situación así, así que espere que entraran los veinticinco mochos, y medesquite insultando a tres mujeres, sabiendo que era menos improbable que me cagaran a palos, igualmente me gritaron “chupame la argolla”, y fue un jaque mate a mis provocaciones, y como un perro mojado me retire irritado, humillado, con el bolso roto hacia la boca de subte.

En estos momentos estoy disfrutando mi compra en casa, pero no lo suficiente porque se me da la idea que para disfrutar este extraño aparato hay que estar en pedo, por lo cual me pongo en pedo y me termino colgando viendo culos en lo de Tinelli, pero ya se dara la oportunidad de jugarlo sobrio, por lo menos un rato antes que lo revenda en Internet.