Bola Hámster.

Tres han sido las actividades permanentes que realice en este primer mes de desempleo y agonía. Comer de más, dejarme la barba y jugar al bola hámster.

Algo de drogas, un poco de fútbol y alguna que otra película completan el panorama.

Nada de viajes en búsqueda de uno mismo, nada de ejercicios físicos y nada de búsqueda de trabajo de momento.

Intente, no voy a decir que no intente, pero morí en el intento, como si hoy tuviera muy bajas las defensas para un nuevo cambio de clima, me siento bien, al pedo y sin objetivos con un poco de incertidumbre pero bien al fin.

Los domingos en casa compran Clarín, les gusta despertarse puteando al gobierno y acostándose leyendo la Viva, los clasificados nunca se tocan, excepto cuando quiero corroborar si hay suba de precios o no en las trolas del rubro 59.

La semana pasada sin embargo mate dos pájaros de un tiro, certifique que el precio de travestis, putas y “perforadores humanas” se mantienen estables pese al aumento inflacionario que nos quiere hacer tragar, y por otro lado descubrí que buscar trabajo va a ser una ardua tarea que va a significar un aumento estrepitoso de mentiras en el currículo vitae incluida foto de antaño donde estaba mas lindo y un poco menos arruinado.

Va a ser difícil lo se, no tener titulo secundario, haber tenido dos trabajos solamente, y no haber completado ninguno de los cursos en los que me aliste van a ser vacíos escandalosamente maquillados, para poder caer parado (aunque sea con un pie) en alguna importante empresa llena de mujeres, para poder pilotearla desde adentro y materializar fantasias sexuales en el baño laboral.

Va a costar, pero arriesgare mis últimos cartuchos antes de meterme en el narcotráfico, regenteo de trolas, bailarín disfrazado de reconocida empresa de empanadas.

Clasificado tipo “Empleado hasta 25 años. Resida en Capital federal. Muy buena presencia. Titulo secundario. Experiencia en el rubro. Conocimientos de ingles. Sueldo 2000 pesos. Enviar CV urgente a rrhh@empresa.com”

 

En este solo anuncio encontramos fácilmente ocho trabas hacia mi persona, algunas mas dóciles otras mas complicadas.

Tengo 26 años, resido en el culo del mundo cerca de la laguna de San Vicente, mi presencia va en rápida decaída, me queda para rendir Matemática en el colegio, solo tengo experiencia con vacas y turismo, mi ingles es parecido al de Jacobo Winograd, el ritmo de vida de un blogstar esta por encima de los 3000 pesos básicos, y no tengo Internet, así que de urgente las pelotas.

 

El trabajo perfecto se escoltaría bajo este otro tipo de clasificado laboral.

 

“Empleado de 26 pa arriba. Resida en zona sur, preferentemente cerca de algún aglomerado de agua. Presencia decente, “dentadura completa” se aceptan con kilos de mas y barba. Titulo primario. Sin experiencia. Conocimientos de español. Sueldo 3000 pesos y un sanguche de milanesa por día Enviar CV cuando le conecten Internet a rrhh@empresa.com”

 

Como de momento no e visto clasificados tan estimulantes, seguiré dedicando mi tiempo libre a escuchar La Polla, tomar cerveza en la laguna, jugar al papi, pasear en la moto, drogarme, leer el rubro 59, acabar con el hambre en África, mirar la Champions, mirar películas, bajarme porno, pero por sobre todo jugar al Bola Hamster (Rapid Roll)la adicción mas inesperada, un juego de celular que promueve la superación constante de uno mismo, mientras intenta salvar al hámster que va rodando en su bolita por un agobiante pasadizo entre pinches y abismos infernales. Lo triste que el juego siempre termina con la muerte del pobre animalito.